viernes, 18 de septiembre de 2015

ARROZ AL HORNO Y EN COSTRA





Necesitamos para cuatro personas:

Dos vasos de arroz (400 gr),  
Tres   pedazos de costillas de cerdo por persona (100 gr)  
Tres trocitos de pollo troceado por persona (100 gr)
200 gr de tocino blanco en tacos
4 morcillas de cebolla no muy tiernas
3 Longanizas blancas cortadas a trozos
Garbanzos  ya hervidos (100 gr)
2 patatas medianas
2  tomates   
1 cabeza de ajos entera
Azafrán en hebra
Colorante alimentario  si lo queréis más amarillo
Sal
Un par de cucharaditas de pimentón de hojilla
Agua, caldo de puchero o de un fondo ligero.   

Al lío:

  Pelamos y cortamos las patatas en rodajas y las  freímos en abundante aceite de oliva.  Las reservamos. 

  En este mismo aceite vamos a sofriendo todo lo demás. Empezamos por la cabeza de ajos a la que hemos pelado de su envoltorio sin romperla, las costillitas de cerdo y el pollo, previamente salados, el tocino, las longanizas y las morcillas. Reservamos todo.

   Ponemos el horno a  calentar a 200°.

   En la cazuela de barro que vamos a cocinar, sofreímos con el aceite de la sartén el tomate rallado con una cucharada de pimentón de hojilla. Removemos bien con cuidado de que no se nos queme. Añadimos el arroz y mezclamos sofriendolo sin parar hasta que veamos que ha cambiado ligeramente de color. Repartimos bien el arroz y le añadimos la carne que hemos sofrito, las longanizas las morcillas, los garbanzos, las hebras de azafrán previamente tostado y por encima, distribuimos las patatas y unas lonchas finas de tomate. Cubrimos con el doble de líquido que de arroz, colorante si lo queremos más amarillo, probamos de sal  y lo llevamos al horno. Antes, colocamos la cabeza de ajos en el centro de la cazuela.

  Entre 20 o 25 minutos debe quedar totalmente seco. Me gusta apagarlo un poco antes y dejarlo reposar tapado con papel de periódico para que termine de absorber. Pero eso ya va a gustos de cada uno.

   Existen variante donde este arroz se hace con las sobras del puchero o la carne se hierve antes en una olla (especial si se pone patas de cerdo que cuestan más en hacerse cociendo junto con los garbanzos, sofriendo solo el ajo, las morcillas, las longanizas y el tomate.

   Para hacer el arroz en costra a la manera tradicional.

   Debes haber encendido la Costrera que no es más que un artilugio de doble fondo donde se queman ascuas en la parte superior y puede ser depositado encima de la cazuela por su parte inferior y así trasmitirle el calor y cueza el batido del huevo y lo dore.



   Cuando el arroz esté hecho, se saca del horno y se le añade por encima ocho huevos batidos repartiéndolos homogéneamente para que tapen por completo la cazuela sin tocarlo. Taparlo con la costrera hasta  que el huevo haya cuajado y esté dorado.

   Si no se dispone de la costrera, hacer la misma operación e introducirla la cazuela en la parte de arriba del  horno (sin haberlo apagado) y encenderle  el grill.

   Os aproveche.