Mi receta publicada en el Blog Vida Mediterránea
Este guiso de pollo y conejo en verano solía hacerse para cenar. Cenas bajo el parral o bajo las estrellas, en las casitas de campo, después de un largo y caluroso día.
Solía acompañarse con una buena ensalada de tomate y cebolla de la huerta, con un poquito de sal y regada con un buen aceite de oliva. Vamos a ver cómo se prepara y qué necesitamos para ello:
INGREDIENTES (para 6 personas)
6 trozos de pollo
6 trozos de conejo
4 patatas
3 dientes de ajo
1 ó 2 pimientos picantes tiernos
1 Pimiento rojo asado
1 tomate rallado
Pimentón de hojilla, sal, aceite de oliva, azafrán en hebras y agua
ELABORACIÓN:
Salamos la carne.
Cubrimos el fondo de la cazuela con aceite de oliva, cuando esté caliente sin humear incorporamos los trozos de pollo y conejo. Sofreímos bien por todos los lados a fuego medio.
Cuando casi ya estén bien sofritos, incorporamos los dientes de ajos pelados y laminados. Bajamos el fuego con cuidado que no se nos quemen.
Añadimos una cucharadita de pimentón de hojilla, dos vueltecitas y añadimos el tomate rallado y mezclamos todo bien.
Cuando el tomate esté frito, cubrimos con agua y añadimos el pimentón rojo asado en tiritas. Dejamos que hierva a fuego bajo entre treinta y cuarenta y cinco minutos.
Pelamos y chascamos las patatas en trozos medianos y los añadimos al guiso.
Opcionalmente dejamos caer uno o dos picantes enteros sin pincharlos.
Cuando empiece a hervir, probamos de sal y rectificamos si es necesario.
Picamos el azafrán en hebras que hemos tenido entre papel sobre la tapa para secarlo (pasamos una cuchara por encima del papel haciendo presión). Lo incorporamos.
Dejamos cocer a fuego mínimo alrededor de media hora.
Pinchamos la patata y si esta buena… Servimos.
Los picantes para repartir o para aquel que le guste.
