No deja de ser un arroz relleno, que se
denomina “arròs a la muntanyeta” en mi pueblo Pedreguer, pero que lo realizamos
con las carnes del puchero y su caldo.
De lo que nos sobra del puchero podemos
aprovecharlo todo. Así pues existen varios platos tradicionales que podemos
realizar con ellas: la ropa vieja, la paella de puchero, croquetas, este arroz…
Vamos allá pues. Necesitaremos para cuatro
personas:
500 gr de carne del puchero
1 cebolla pequeña
2 tomates grandes maduro (O de conserva
enteros)
2 dientes de ajo
Pimentón de hojilla Rebost
1 litro del caldo de puchero
Arroz JSendra de Tartana
Aceite, sal, perejil fresco
4 huevos de gallinas criadas en el suelo
Rallamos el tomate y cortamos la cebolla muy
fina al estilo Brunoise.
En un cazo, vamos a poner al fuego el caldo de
puchero y cuando empiece a hervir, echamos el arroz que debemos cocer y dejar
meloso subido a seco. Cuidado con el punto debe quedar hecho y entero. El arroz
JSendra es especial para esto.
Paella al fuego, cubrimos el fondo con aceite
de oliva virgen. Echamos la cebolla. Con un prensador de ajos, los pelamos y los
estrujamos y así triturados los dos dientes de ajos los incorporamos. Ahora una
buena cucharada de pimentón de hojilla, removemos y enseguida el tomate que
hemos rallado. Todo rápido para que no se nos queme ni el ajo ni el pimentón.
A mí, por aquello de la acidez del tomate me
gusta añadirle, una vez rallado, una cucharadita de bicarbonato. El azúcar, al
contrario de lo que piense todo el mundo, enmascara su acidez y lo endulza,
pero no la quita.
Vigilamos el arroz jugando con la intensidad
del fuego. Que evapore lo justo para que aguante los 18 minutos aproximados de
cocción. Probamos de sal. Removemos si es necesario.
Removemos el tomate y echamos la carne. Mezclamos
y tapamos para que el tomate suelto su agua. Cuando veamos que eso ha ocurrido,
probamos de sal y añadimos si es necesario.
Removemos y dejamos destapado para que reduzca y evapore el agua.
Retiramos el arroz del fuego y comprobamos,
removiendo con una cuchara, que ha quedado suelto pero con melosidad y sobre
todo, cocinado.
En otra sartén. Hora de freír los huevos con
abundante aceite de oliva.
Emplatamos ayudándonos de un aro que pondremos
en el centro del plato y rellenamos con una capa de arroz, y otra de la carne
que hemos cocinado. Repetimos con otra capa de arroz, y ahora de carne con su salsita.
Coronamos con un huevo frito y retiramos el aro.
¿Decoramos con perejil?