jueves, 16 de junio de 2022

SOPA FRÍA CON KÉFIR Y REMOLACHA

 


El kefir es hoy por hoy, el rey de los probióticos. Es una bebida láctea fermentada, la más antigua que se conoce. Su origen se remonta a muchos siglos atrás cuando los pastores de las montañas del Cáucaso almacenaban en recipientes de cuero (Odres) la leche que fermentaba generando una bebida con un sabor muy parecido a un yogurt agrio gaseoso. La palabra kéfir proviene de la palabra turca KEIF que significa “sentirse bien”.

Las colonias de microorganismos que fermentan la leche, preferiblemente entera, para elaborar el kéfir se conocen como 'coliflor', 'nódulos' o 'grumos' del kéfir. Tienen, en efecto, el aspecto de una coliflor blanca y grumosa y contienen todos los géneros de hongos y bacterias necesarios para que, introduciéndolo en leche pudiéramos conseguir fabricar nuestro propio Kéfir. Leer más pinchando AQUÍ.

En España no hace demasiado tiempo que es conocido. Actualmente se ha popularizado y es muy fácil adquirirlo en tiendas, supermercados y grandes superficies. Pero cuidado, que no todo lo que venden es kéfir.

  

Foto: Manuel Almagro Rivas.  'coliflor', 'nódulos' o 'Grumos' del kéfir

Para la receta necesitamos para 4 personas:

1 tarro de remolacha encurtida (500 gr.) en rodajas

½ litro de kéfir

½ litro de leche desnatada

1 yogur del tipo griego

1 cebolla tierna con hojas y cebollino

Eneldo

2 pepinos fresco

Sal

2 huevos

Vamos a triturar: la cebolla (reservamos las hojas verdes) finamente picada. La remolacha la sacamos del tarro (podemos hervirla nosotros comprando remolacha fresca), reservaremos 4 rodajitas y el resto la cortamos en trozos. Un pepino lo cortamos a trocitos pequeños.  Añadimos el kéfir, la leche, la mitad del yogur, sal al gusto y trituramos todo. Llevamos a la nevera a enfriar.

Hervimos los huevos para hacerlos duros. Cortamos el cebollino y a parte, las hojas verdes de la cebolla muy finamente. Haremos lo mismo con el eneldo, cortamos muy fino. Reservamos unas ramitas. Haremos también lo mismo con el pepino que nos queda.

Sacamos de la nevera y le incorporamos, el pepino, el eneldo y las hojas de la cebolla. Removemos con una cuchara.

Emplatamos con dos cucharones de esta sopa fría que hemos hecho en cada plato, le dejamos caer la rodajita de remolacha que hemos reservado, encima de ella, del medio yogur, una cucharadita, cebollino y una ramita de eneldo. Finalmente colocamos dos trocitos de huevo duro y… a comer.